¿Respiras?

Por la nariz.

Inhalación lenta y plena.

Exhalación libre y extensa.

Cuando respiramos por la nariz balanceamos nuestros niveles de CO2 y O2 gracias a la labor de los pulmones, así como, mantenemos el nivel de PH adecuado en sangre. Además, la nariz está preparada para ralentizar, calentar y filtrar el aire. En cambio, cuando respiramos por la boca esto no sucede y el cuerpo, en un intento de avisar y compensar dichos niveles, acelerará la respiración.

Contactar con nuestra función biológica más básica e importante (al descansar, cocinar, conducir, dormir…) favorece a nuestro sistema inmune, sistema nervioso, salud dental, calidad de sueño, piel …

Por la nariz.

Inhalación lenta y plena.

Exhalación libre y extensa.

Previous
Previous

Técnica y creación

Next
Next

Diseño Humano